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Los 15 años son una edad maravillosa en muchos sentidos, y algo tormentosa en algunos. Pues es la edad de descubrir el mundo, de enamorarse, de hacer deportes, de pensar en una carrera universitaria y de qué tipo de persona se quiere ser.
Pero, por otro lado, es una edad que está en cierta especie de limbo, pues eres muy grande para disfrutar las cosas de niños, y muy pequeño para disfrutar las de los adultos. Lastimosamente, Jairo Molano no tiene tiempo para ponerse a pensar en esos azares de la vida adolescente, pues tiene un mayor problema entre manos.
Procedente de Pitalito Huila, llegó a Bogotá en compañía de su primo más querido y mayor apoyo en estos tiempos tan difíciles. Jaime, tuvo que emprender tal travesía en orden de salvar su vida, pues fue diagnosticado con leucemia linfoide aguda.
Por motivos de carácter personal y familiar, Jaime se vio cobijado bajo el manto de una trabajadora social, que por gracia de Dios, lo remitió a la Fundación Dharma. Esto, con toda la fe depositada en que estará en el mejor lugar para ser acompañado durante esta dura etapa.
Jairo llega a la capital, y con toda la fe y las ganas de luchar, lo comienzan a tratar el 25 de enero del 2020, y tras un año de fuertes batallas, en diciembre de ese mismo año, lo pasan a mantenimiento intratecal mensual.
El caso de Jaime es de admirar, un joven luchador, de tierras lejanas, que sabiendo que está solo y con minoría de edad; decide armarse de valor y luchar por su vida. Pero claro, todo héroe necesita ayuda, y en Fundación Dharma seremos su compañero, sus ojos, sus oídos y su boca. Velaremos por él, y haremos lo que esté a nuestro alcance para ayudarlo a salvar su vida. Esperando, que prontamente, pueda salir a disfrutar esa vida de adolescente.
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