William Armando Corredor es un artista plástico que hace parte de nuestros amigos y voluntarios de Fundación Dharma, quien llegó por medio de Diana Sotelo, también voluntaria.
El valor del servicio a los demás de William lo motivó a llevar su talento y creatividad al hogar de nuestros niños y mamitas beneficiarios; por medio de un mural plasmó la alegría, la paz y la esperanza que necesitan las familias: “que los colores sean la puerta para imaginar un espacio diferente para los niños, que son el motivo de la fundación, por eso con mi obra, decidí darle vida a este muro”, expresó William.
Las pequeñas acciones puestas a disposición de nuestros beneficiarios, nos permiten seguir brindando sonrisas y alivio a cada familia que lucha ante la adversidad. En Fundación Dharma apoyamos con la alimentación, la vivienda y el acompañamiento a niños diagnosticados con cáncer, que día a día nos enseñan a ver la vida con ojos de esperanza.
Nuestro compromiso continúa y el apoyo que recibimos de corazones generosos que aportan su servicio a nuestra misión, permite que sigamos devolviendo sonrisas.
Gracias a William Corredor y Diana Callejas, quienes brindan su talento y cariño para hacer de este hogar un espacio lleno de ilusión.
